¡Desarrolla el espíritu invencible del guerrero con Budoshin!
El espíritu de un artista marcial es tan importante como la destreza física, la capacidad de lucha y las habilidades marciales. Es el espíritu el que impulsa al artista marcial a alcanzar mayores alturas cuando el cuerpo físico se agota y aparentemente es incapaz de seguir adelante.
Además de la fuerza interna para ayudar a superar los límites físicos, el carácter del artista marcial es de suma importancia. Un artista marcial que posee un carácter casi perfecto es aquel que está iluminado a través de su entrenamiento y experiencia en las artes marciales. Esta persona es confiable, honesta y encarna la verdadera naturaleza de un artista marcial.
Budoshin describe el espíritu y el carácter de un guerrero. Describe el corazón del guerrero. En mi experiencia, el entrenamiento efectivo y correcto de las artes marciales se dirige a la mente, el cuerpo y el espíritu del practicante. Esto crea armonía y equilibrio para una persona que es capaz de hacer un gran daño y aplicar su mejor juicio para controlar el resultado de un conflicto dado.
Los principios de Budoshin
Resistencia
Debes resistir a través de las dificultades. Nada debe poder quebrar tu espíritu. ¿Cómo resistes? Resistes a través de pequeñas batallas al principio. Resiste a través de tu entrenamiento y tus excusas para no entrenar. Lentamente y progresivamente, tus batallas y tus luchas se vuelven más grandes e intensas. Resiste a través de todas ellas hasta que tu espíritu se vuelva firme e inquebrantable. Resiste en la posición de seiza o en la postura de caballo hasta que sea físicamente intolerable y luego resiste un poco más.
Perseverancia
Debes perseverar en tus difíciles metas. No te rindas cuando la tarea se vuelva difícil, aburrida o laboriosa. Disfruta del proceso, mantente firme, abraza la dificultad y prospera a pesar de ella. Esto te dará una voluntad de hierro y te hará imparable. Te ayudará a crecer y superar a tus demonios y oponentes.
Ética recta
Siempre sé puntual o llega temprano. Trata la tarea en mano con una importancia suprema. No importa cuán trivial sea la tarea, valórala y dale el respeto que se merece. La tarea puede derivar de tu profesión, tu deber con tu familia o tus tareas domésticas. No importa. Mantén un enfoque preciso sin distracciones. Está totalmente presente en el momento y sumérgete en él. Esfuerzate por completar tu tarea perfectamente y busca constantemente mejoras en cómo llevarlas a cabo. Más importante que mejorar tus métodos, es mejorar tú mismo. Desarrolla tu carácter y tus habilidades. Comprende tus debilidades y limitaciones y trabaja en ellas en cada momento consciente.
¿Cómo desarrolla un artista marcial el Budoshin?
Como artista marcial, debes abrazar el Budoshin en todos los aspectos de ti mismo. Debe infiltrarse y permear en cada aspecto de tu ser. Debes vivirlo y esforzarte por estar presente en cada momento con un enfoque y atención perfectos. No importa la tarea que se te presente, debes perseguirla con ferocidad y esforzarte por completarla lo mejor que puedas. El mismo enfoque debe aplicarse a tu entrenamiento de artes marciales.
Sé «aquí» y «ahora»
El Budoshin exige una atención perfecta. Debes desarrollar la capacidad de estar completamente presente en cada momento. Nuestras mentes se enfocan en el pasado, lamentándose por todos los remordimientos de nuestra vida, o se enfocan en el futuro, donde vivimos con miedo de lo que puede o no puede suceder. Muy raramente vivimos en el momento presente y lo experimentamos en todo lo que tiene para ofrecer. Esto nos exige detener nuestro constante pensamiento y en lugar de eso, sentir y experimentar nuestro momento presente con todos nuestros sentidos. Esta atención plena también debe extenderse hacia adentro, permitiéndonos obtener una comprensión más profunda de nuestras emociones y conexión con nuestra situación o circunstancia actual. Esto, a su vez, nos brinda una comprensión más fundamental de quiénes somos y desbloquea nuevas oportunidades de autodesarrollo y espiritualidad.
Inteligencia corporal
Nuestros cuerpos no son solo músculos, huesos y sangre. Todo está interconectado a través de una compleja red de nervios que conforman nuestro sistema nervioso. Estas vías neuronales pueden adaptarse y crecer para permitirnos afinar y desarrollar nuevas habilidades. Esta conexión se alimenta a través de corrientes eléctricas y sistemas de energía que aparentemente se extienden más allá de lo físico.
Como guerreros, entrenamos nuestros cuerpos para el combate. Esto requiere habilidad, fuerza, velocidad y resistencia. Tenemos una buena comprensión de cómo nuestros músculos se reclutan para cumplir con la tarea en cuestión y respondemos e fluimos intuitivamente a las demandas del combate. Un guerrero consciente del Budoshin también entrena su voluntad. Este guerrero perfecciona esta energía de intención y voluntad para llevar este cuerpo físico más allá de sus límites físicos. A medida que se superan los límites físicos, el guerrero desarrolla una nueva comprensión de cómo el cuerpo y el espíritu pueden actuar como uno solo. Al unir estos aspectos, el guerrero se vuelve más completo y formidable.
Sabiduría sobre conocimiento
Como artista marcial, es posible que te hayas encontrado con esta cita de Bruce Lee:
«Saber no es suficiente, debemos aplicar. Estar dispuestos no es suficiente, debemos hacerlo».
Esta cita encapsula la esencia de la sabiduría sobre el conocimiento. Si exploramos nuestra mente, es posible que podamos recordar millones de hechos, algunos útiles y otros no. Hemos pasado toda nuestra vida adquiriendo una variedad de conocimientos codificados. Incluso esto incluye nuestras artes marciales. ¿De qué sirve este conocimiento si no podemos aplicarlo para beneficiarnos a nosotros mismos y a los demás? La mera adquisición de conocimiento es inútil hasta que encontremos un problema o desafío adecuado para aplicarlo.
La sabiduría es la aplicación del conocimiento. Es saber cuándo y cómo utilizar este conocimiento para resolver un problema o superar un obstáculo. Un ejemplo de esto es el uso de técnicas aprendidas en el dojo en la aplicación del sparring. Ganamos experiencia mediante el sparring, aprendiendo qué técnicas funcionan en qué situaciones. Aplicamos nuestra sabiduría al combate real, lo cual será el factor determinante de si sobrevivimos o no. Sin el sparring, las técnicas que hemos aprendido tienen poco o ningún valor para el combate real.
Vivir con propósito
Esforzate por comprender el propósito detrás de cada acción. Piensa, muévete y actúa con la intención de lograr el resultado que visualizas. Esto se logra controlando los pensamientos y emociones que surgen en tu conciencia y que te causan conflicto interno. Al detener este intrincado fidgeting cognitivo interno y permitir que tus pensamientos y emociones viajen libremente sin cambiar tu estado interno, detienes tu reacción automática a ellos. Con una mente libre de cargas, te conviertes en el maestro de tu propio camino. Ya no eres influenciado por los remordimientos del pasado y el miedo al futuro. Vives en armonía contigo mismo.
Constantemente evoluciona y adapta
Lo único constante es el cambio y el guerrero exitoso es capaz de resistir las mareas del cambio al adaptarse y reinventarse constantemente. Al igual que una serpiente cambia de piel, libérate de lo que ya no es útil y adquiere nuevas habilidades y sabiduría, emergiendo así renovado. Para evolucionar constantemente, debes responder al cambio y ser un aprendiz perpetuo. Esto requiere un grado de humildad donde reconoces que tus habilidades y conocimientos actuales ya no son relevantes ni suficientes. Al abrazar esta mentalidad, eres constante en tu preparación y estás listo para todos los desafíos que la vida te presente.
Pensamientos finales
Budoshin es el espíritu del guerrero. Permite que el guerrero permanezca firme, implacable y formidable. Al abrazar el Budoshin, trasciendes la comprensión común de un guerrero más allá de lo físico y te esfuerzas por un propósito más elevado. Ese propósito es ser útil. Ser útil para ti mismo, tu familia y tu comunidad.